Concluida la semana que tenía asignada a Madeira, continúo mi visita a Portugal (en este caso a su sector continental) destinándole la otra semana a Lisboa y sus alrededores. Vamos a ver varios circuitos partiendo desde esta capital con destino a faros o sitios relacionados con ellos. El más cercano es Belém y su emblema. La histórica Fortaleza que durante un lapso de su historia albergó una estructura que funcionaba como faro.
Para movernos en dichos circuitos vamos a exprimir al máximo esta tarjeta.
La compré vía internet y la recogí en la Plaza del Comercio. Es una tarjeta para utilizar durante 72 hs en toda la red de transporte dentro de Lisboa y también en los trenes semi urbanos a Cascais y a Sintra.
Belém está muy cerca de Lisboa. Todos los buses turísticos lo tienen dentro de su itinerario. Pero vamos a ir de forma independiente utilizando el tren.
De las 2 estaciones de tren cercanas al centro de Lisboa nos vamos a dirigir (vía subte en mi caso) a la de Cais do Sodré (la otra es Rossio). De esta estación sale la línea que corre paralela al Río Tajo hasta más allá de su desembocadura al Atlántico. Hasta los espectaculares sitios turísticos como Estoril o Cascais.
Nos subimos al tren, el cual luce así:
Una de las primeras estaciones es Belém. Pero antes de llegar a ella tengo un primer contacto cercano con el maravilloso puente colgante "25 de abril".
Me bajo en mi destino y desde allí la recorrida va a ser más o menos así hasta la Fortaleza.
Frente a la estación de trenes se encuentra la Estación Fluvial la cual es utilizada por ejemplo por el bote turístico que hace el triángulo Lisboa-Cacilhas-Belem. Su antiguo edificio tiene una torre con reloj y lo que podríamos también interpretar como un faro. Ya que estamos le sacamos una foto.
La próxima parada es el Monumento a los Navegantes.
Tomo el ascensor y voy hacia la terraza desde la cual se tienen unas muy buenas vistas de la zona.
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El Monasterio de los Jerónimos y atrás el estadio de los Belenenses. En primer plano abajo, las vías del tren que me trajo
hasta acá. |
Vista al oeste. Hacia allá voy.
Pero antes un poco de zoom para tener un primer plano de la Torre.
Me bajo y continúo mi caminata, pero antes una foto del puente, el monumento y el barco.
¿Y esto qué es?
Luce como un Faro...
Pero no tengo registro de que haya funcionado como tal alguna vez. Me parece que está para completar la escenografía marina del lugar.
Y llegamos a la Torre de Belém. Algunas fotos de su exterior desde varios ángulos.
Realmente es muy bonita. Vamos a intentar entrar.
Mucho turismo, esperé unos 15 minutos hasta que me llegó el turno.
Muy bien cuidada y explicada. Con mucha infografía en varios idiomas.
Y he aquí la prueba de porqué este sitio está en este blog. En 1865 se le instaló un faro en su terraza (foto inferior). No quedaban marcas en el piso de donde pudo haber estado asentado.
Algunas fotos desde la terraza inferior.
Como verán, el acceso a la parte superior estaba más congestionada que la entrada misma a la fortaleza. Desistí de subir y me concentré en la caseta de guardia orientada hacia el oeste.
Miren lo que se aprecia en el horizonte si hacemos un zoom completo.
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Faro de Bugio |
Es el Faro de Bugio que está instalado en la desembocadura del río Tajo que les mencioné más arriba.
Empiezo a volver sin antes comprar los clásicos souvenirs y recuerdos del lugar, entre los cuales, por ejemplo, está una moneda estampada en el momento por la misma máquina expendedora.
Todos estos objetos destinados a quedar en el olvido del viajero y de los parientes destinatarios de los mismos. Siempre lo mismo. Uno se juramenta no gastar dinero en ellos, pero cuando estoy en el lugar me siento en la obligación de comprar algo. Algún imancito o una muñequita o un cartelito, o cualquier cosita para regalar.
Una última foto de la fortaleza. En este caso una miniatura que se encuentra en el exterior. Me vuelvo en tren, organizando mentalmente mi viaje del día siguiente a Sintra y Cabo da Roca.